Sabemos que eres cuidadoso/a, pero los alimentos tienden a caerse de la sartén, y el agua a saltar de la cazuela, tranquilo/a no eres tú, es la ley de Murphy. Por este motivo hoy queremos compartir contigo algunos trucos para que tu placa esté siempre como el primer día.
- No lo dejes para después. Es importante limpiarla al momento. Si lo hacemos rápido, evitamos que las sustancias se sequen y se peguen. Eso sí, la zona de los fuegos, debemos dejarla enfriar.
- Cuidado con las esponjas que rallan. Debemos utilizar esponjas suaves para evitar las ralladuras.
- No utilizar productos abrasivos.
- Rascador para vidrio. Si tenemos una vitrocerámica, podemos utilizarlo con cuidado y sólo en los casos en que la suciedad se nos resista.
- Parrillas de hierro fundido al lavavajillas. Si tienes una placa a gas, con este tipo de parrillas estás de suerte, puesto que las puedrás meter directamente en el lavavajillas.
- Remedio casero. Si no tienes un producto específico a mano de limpieza para la placa, siempre puedes recurrir a los productos naturales como el limón y el vinagre. Te sorprenderá el resultado.
Y para finalizar, te dejamos un consejo básico, ponte música para limpiar, seguro que te parecerá mucho menos aburrido 😉